Descripción
Es un gel emulsión de uso familiar que ayuda a hidratar la piel y la protege de las radiaciones solares gracias a sus filtros fotoprotectores. Indicado para la prevención de daños solares agudos como la eritema o la quemadura solar, el envejecimiento prematuro y enfermedades en la piel. Puede utilizarse en el cuero cabelludo en casos de alopecia. Recomendado para todo tipo de piel. No es comedogénico, formulado sin alcohol.
Modo de empleo
Aplicar en la piel del rostro y cuerpo, dos veces al día.
Composición
AQUA, CYCLOHEXAMETHICONE, ISOAMYL–‐P–‐METHOXYCINNAMATE, C12–‐C15 ALKYL BENZOATE, TITANIUM DIOXIDE, ETHYLHEXYL TRIAZONE, OCTOCRYLENE, POLYACRYLAMIDE, PHENYLBENZIMIDAZOLE SULFONIC ACID, PEG/PPG–‐20/6 DIMETHICONE, GLYCERIN, PROPYLENEGLYCOL, DIETHYLAMINO HYDROXYLBENZOYL HEXYL BENZOATE, DISODIUM PHENYL DIBENZIMIDAZOLE TETRASULFONATE, C13–‐C14 ISOPARAFFIN, PPG–‐15 STEARYL ETHER, CAPRYLIC/CAPRIC TRIGLYCERIDE, POLYHYDROXYSTEARIC ACID, LAURETH–‐7, ALUMINIUM STEARATE, PHENOXYETHANOL, SOSIUM HYDROXYDE, ALUMINA, DICHLOROBENZYL ALCOHOL, SORBIC ACID, DISODIUM EDTA, BHT, PARFUM, BENZYL SALICYLATE, CITRONELLOL, GERANIOL, HEXYL CINNAMIC ALDEHYDE, LIMONENE, LINALOOL.
Consejo Farmacéutico
Para que la fotoprotección sea efectiva, recuerda que hay que aplicarla en cantidad suficiente, extenderla de manera homogénea y reaplicarla cada 2 horas, tras el baño o haber sudado. Junto al uso de la fotoprotección tópica, utiliza métodos de protección complementarios: accesorios como sombreros de ala, gafas de sol y ropa adecuada. Refuerza el cuidado de la piel con fotoprotección oral (en forma de complemento alimenticio) junto a una dieta equilibrada. Evita la exposición durante las horas centrales del día (entre las 12:00 y las 16:00). No expongas a los bebés y niños pequeños a la luz solar directa. La sobreexposición produce daño oxidativo, es causa de fotoenvejecimiento y favorece la aparición de enfermedades en la piel. No olvides aplicar tanto en tu rostro como en tu cuerpo aftersun para que tu piel mantenga los antioxidantes y la hidratación diaria necesaria.
Revisa periódicamente la aparición o cambios en los lunares (de forma, tamaño o color). Si tomas medicamentos fotosensibilizantes o tienes alguna patología cutánea, el seguimiento de estas recomendaciones es especialmente importante. En todo caso, si tras la exposición solar te aparecen ampollas, fiebre o dolor de cabeza, consulta con tu médico.