Description
En algunas ocasiones, al mantener relaciones sexuales podemos notar pequeñas molestias en la zona íntima. Normalmente están motivadas por la sequedad de la zona vaginal. Sin lubricación natural no logramos disfrutar plenamente del placer de la relación, y además, nos arriesgamos a roturas del preservativo e incluso infecciones por el roce.
Durex® Play Frescor es un lubricante que ofrece una ayuda en tus relaciones aportando un extra de humedad a tu zona íntima. Consigue eliminar la sequedad vaginal contrarrestando la falta de lubricación natural.
Además, el lubricante Durex® Play Frescor es soluble al agua, eliminándose fácilmente sin dejar manchas y te aporta un efecto cosquilleo muy estimulante, pasando del calor a una sensación de frescor.
*No contiene espermicida. No tiene acción anticonceptiva.
¡Recupera el placer en tus relaciones sexuales!
Modo de empleo
Aplicar el lubricante tras colocar el preservativo. Desechar 3 meses después de la apertura del envase.
Vídeo del producto
Consejo Farmacéutico
La sequedad vaginal es un problema benigno, pero molesto, que afecta a muchas personas. Puede aparecer a cualquier edad y originarse por diferentes causas: la disminución de estrógenos durante la menopausia, la etapa del postparto, la toma de ciertos medicamentos o tratamientos médicos, infecciones vaginales recurrentes, niveles muy altos de estrés…
Se debe a una disminución del flujo vaginal y suele haber un desequilibrio en la microbiota vaginal. Los síntomas que conlleva son sensación de tirantez, ardor, picores, o dolor, y suelen incrementarse durante las relaciones sexuales o al orinar.
Por un lado, es recomendable utilizar limpiadores con un pH compatible con el de la zona vulvar, para contribuir así a su equilibrio. Además, los hidratantes vulvares (externos) y vaginales (internos,) o vulvo-vaginales si sirven para ambas localizaciones, contribuyen a mantener la mucosa hidratada y confortable. Asimismo, el uso de lubricantes de base acuosa también puede facilitar las relaciones sexuales. Todos ellos son productos complementarios, cada uno tiene una función concreta. Siempre es aconsejable acompañar su uso con unos hábitos de higiene adecuados, una alimentación variada y que incluya grasas de calidad (aceite de oliva, frutos secos…), así como seguir las indicaciones de tu ginecólogo/a en cada situación concreta.
Si los síntomas no mejoran, consulta con tu ginecólogo/a.