Descripción
Es un aperitivo elaborado con harina de lentejas y patata, de cultivo ecológico, ideales para usar como snack o aperitivo. Son un snack elaborado a base de harina de lentejas y patata procedentes de cultivo ecológico. Es un producto muy saludable, pensado para consumirlo en cualquier momento y lugar. Las lentejas pertenecen a la familia de las leguminosas y son una fuente de propiedades muy importante para el organismo. Contienen fibra, la cual ayuda al tránsito intestinal. Es poseedora de vitaminas del grupo B las cuales ayudan a la formación de glóbulos rojos, hormonas, combate la anemia. Las lentejas son muy ricas en hidratos de carbono los cuales aportan energía para que nuestro organismo lleve a cabo las funciones vitales. Contiene hierro. El hierro fortalece el sistema inmunitario y ayuda a regular la temperatura corporal. Otras de las muchas propiedades que podríamos destacar de la lenteja es el magnesio (imprescindible para el sistema nervioso y muscular), el sodio, el potasio, el fósforo, el zinc, proteínas, calcio.
Modo de empleo
Ideales como aperitivo a cualquier hora del día.
Composición
Harina de lenteja (37 %), Harina de lentejas (37 %), Cúrcuma en polvo (0.5 %), Cúrcuma, Sal marina, Patata, Sal / Sodio, Aceite de Girasol, Almidón de patata / Fécula de Patata, Fécula de patata, Harina de patata, Aceite de girasol no hidrogenado.
Consejo Farmacéutico
El hierro es un mineral funcional que contribuye al desarrollo y crecimiento del cuerpo. Además, está presente en la hemoglobina y la mioglobina, proteínas encargadas de transportar el oxígeno de los pulmones al resto del organismo. Por otro lado, el hierro también participa en la creación de hormonas y tejido conectivo.
Nuestro organismo absorbe este mineral de los alimentos, como mariscos, carnes magras, huevo, legumbres y frutos secos. Para facilitar su absorción, es recomendable añadir a la dieta alimentos ácidos y ricos en vitamina C, como el zumo de naranja o de limón. Si no consumimos la cantidad suficiente de hierro se produce la denominada anemia ferropénica, que, a largo plazo, dará pie a síntomas como falta constante de energía, cansancio, trastornos intestinales y/o dificultad para controlar la temperatura del cuerpo. Esta falta de hierro se puede reestablecer a través de una dieta variada y, si no fuera suficiente, con una suplementación controlada. En este último caso, es imprescindible seguir la pauta de un profesional sanitario y evitar siempre la ingesta de un complemento alimenticio que aporte hierro sin conocer si se tiene carencia de este mineral.
Además, las necesidades de hierro que tiene el organismo variarán a lo largo de los años, siendo de especial importancia su regulación durante los años de menstruación, así como en gestantes y lactantes. Asimismo, el hierro participa activamente en los procesos de desarrollo y crecimiento, por lo que es muy importante para el/la recién nacido/a